jueves, mayo 04, 2006

Un libro: Los girasoles ciegos

Los girasoles ciegos, de Alberto Méndez (Anagrama. 2004) es la prueba de que la literatura no ha acabado, de que la novela no está muerta y de que el relato, como género, es puro futuro.

Asomarse a este libro es meterse de lleno en nuestra guerra civil y, sobre todo, en lo que siguió. Puede sentirse (mascarse, olerse, verse y palparse) el horror, la tragedia, el tremendo desatino de unos años que no quedan tan lejos.

Si se quiere sentir (realmente) lo que está viviendo alguien que es trasladado en un carro hacia su fusilamiento, que pase y lea. Pura magia ese trasvase del autor al texto y de éste al lector. Sólo sucede a veces, cuando nos encontramos ante la alta literatura, y eso hay que aprovecharlo.

Aquí, un par de palabras valen más que un millón de imágenes.

Dividido en cuatro relatos (1939, 1940 ,1941 y 1942, con sus títulos) es el único libro publicado por Alberto Méndez y, además, el mismo año que murió.

No es extraño que mereciera el Premio de la Crítica y el Nacional de Literatura.

No creo que resulte extraño pensar que su autor pasó toda la vida escribiendo esta auténtica maravilla.

3 comentarios:

  1. Anónimo4:04 p. m.

    Sólo por lo curioso de la historia del escrito, merece ser la pena leído este libro, pendiente queda. Gracias por recomendarlo

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  2. Anónimo9:15 p. m.

    Solo una sugerencia:
    Puedes añadir música ?
    VTM y tus haikus a la vez puede ser brutal.
    Besos.

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  3. He probado varios sistemas y el único que no vulnera la propiedad intelectual es el de castpost.

    Me queda feo pues todavía no sé utilizarlo bien, pero, al menos, se pueden escuchar canciones, que es de lo que se trata.

    Se admiten sugerencias de canciones, por supuesto.

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