viernes, junio 02, 2006

Vicente Verdú: buenas noticias

Es muy difícil saber lo que pasa y es relativamente sencillo saber qué está pasando.

Lo decía Alvaro García en su poema Situación:

"Deja la actualidad, que se hace sola,
y ve al presente, que te necesita."

De la actualidad, de lo que está pasando, se ocupan, mal que bien, la prensa y la televisión. Pero la actualidad sirve para poca cosa y, de hecho, se ha convertido en un medio de entretenimiento: cualquier telediario contiene hoy más sucesos que noticias y todo, absolutamente todo, se presenta el objetivo de hacer pasar el rato a ese que llaman espectador.
Sin embargo, el presente es distinto y muy difícil de interpretar.
Por eso, contar con alguien como Vicente Verdú es un alivio. La interpretación que hace del presente en su último libro -Yo y tú, objetos de lujo. El personismo: la primera revolución cultural del siglo XXI- (Debate.2005) es muy reveladora.
Entre otros temas, Verdú se ocupa de lo instantáneo como centro de todo, del consumo, de la publicidad, de internet, del personismo como superación de lo individual y colectivo, de una sociedad que, enemiga de la muerte y de lo trágico, se caracteriza, más que nunca, por la búsqueda de la satisfacción.

A mí me ha interesado especialmente el capítulo "La cultura sin culto" en la que se ocupa, entre otras cosas, del libro:
"Leer un libro es siempre una historia prefigurada mientras que el videojuego imita fielmente el avatar de la vida, consecuencias que se crean y conforman a partir de la acción del jugador. Por comparación al videojuego, que requiere acción constante, el libro se presenta ante los nuevos consumidores jóvenes como un ocio demasiado pasivo y sumiso."

"Con el videojuego son protagonistas de la intriga, del enredo, mientras que con el libro se sienten sólo contempladores de lo que vaya pasando."
El libro, en el análisis de Verdú, tan sólo tiene sentido en el best-seller en cuanto objeto que representa un acontecimiento social, algo de lo que hablar, algo que se comenta. Hace muy poco, José María Guelbenzu, en El País, en un artículo titualdo Darwin y los narradores, señalaba el mismo camino.
En este enlace se puede leer el comienzo (deslumbrante) del libro de Verdú.
En este otro link hay una conferencia del mismo autor sobre las ideas de su libro.
Lo que se me olvidaba es la buena noticia: pues que Vicente Verdú ha abierto un blog, que podeis encontrar en este enlace: el blog de Vicente Verdú.
Así que a disfrutar, chavarada, que decían los curas de mi colegio.

9 comentarios:

  1. y qué grandísimo título :)
    Buen fin de semana!

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  2. Gracias, Pussy, hoy pongo enlace a tu blog; lo que no sé es por qué no lo he puesto ya. Buen fin de semana también para ti.

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  3. Leo los artículos de Verdú para el suplemento del país y son geniales. En este estupendo post encima regala el enlace para el blog de Verdú.

    ¡Un saludo!

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  4. Gracias, Alvy, eres muy amable. Un saludo.

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  5. Anónimo1:40 a. m.

    Bébete la vida a grandes sorbos pero sin atragantarte; no mires hacia atrás, ni hacia delante. Fúmate un buen habano y adivina imágenes en el humo.

    Saludos

    PD. Pena del i'lead

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  6. gracias, Pepe. Eso de fumar lo sigo haciendo :))

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  7. Magnífico Verdú. Pero tu artículo no se ha quedado lejos. Muy bueno y estimulante.
    Un abrazo.

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  8. Anónimo3:49 p. m.

    Je, je... lo único que recomiendo fumar son puros o tabaco de liar (es menos dañino). Pero disfruta de cada cosa como si fuera lo último que vas a tener en esta vida.
    Un abrazo

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  9. Este Verdú era antes más combativo, incisivo y mordaz.

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