lunes, febrero 02, 2009

A6, un poema inédito


A-6

He visto
cómo cede la muerte ante el recuerdo
en un ramo de flores
atado al borde de la carretera,
el hito de la desventura,
la señal kilométrica
de algún amor, de su memoria.

He visto
la cresta de la luna reflejada
en el retrovisor
y he contemplado noches de verano
cuando esa luna era una hoguera,
el mar, la arena, un cubo de sangría,
la vida por delante, todo para más tarde.

He visto
el rastro mortecino del día laborable,
el ladrido del viernes,
la calma negociada de la tarde,
el destello de alguna madrugada.

He visto
un desayuno que mi madre
preparó en el sesenta y nueve,
a una muchacha conducir
mientras se maquillaba,
a un hombre adelantar llorando.

He visto
el rastro desgastado de la urgencia,
el cristal empañado del amor,
esa cifra imposible de un asiento vacío.

He oído
tu voz diciéndome al teléfono
“gira a la izquierda y sigue recto,
llámame cuando llegues,
yo te abro”.



Hace un año y dos días: Buenas noticias: El regreso de Tata Golosa: la pastilla (con una reflexión sobre la Viagra) + Publicidad.

Hace un año y un día: El blog de Anna


Technorati tags:

Blogalaxia tags:

6 comentarios:

  1. Anónimo7:59 a. m.

    Muy bonito poema, creo que lo había leído ya, pero cuando lo vuelvo a leer me gusta más. Con los años lo comprendo mejor. Un beso. Mam.

    ResponderEliminar
  2. Anónimo10:05 a. m.

    Yo también lo conocía. Sientan muy bien, no obstante, estas verdades entremezcladas con el recuerdo y la ternura.

    ResponderEliminar
  3. Anónimo10:21 a. m.

    Precioso; es la primera vez que leo un poema a una autopista, y me recuerda (y no me preguntes porqué) a ese librito de JMFonollosa llamado "Barcelona. Ciudad del hombre". Abrazos de lunes. Am

    ResponderEliminar
  4. Gracias, Mam; los poemas, como todo, claro, tienen sus momentos y lo que hoy llega, dentro de un rato a lo mejor no. Un beso :))

    Gracias, Volando; la primera vez que leí este poema en público y, por tanto, lo di a conocer, ejercías tú como anfitrión, así que es un gusto leerte. Un abrazo, primo :)))

    Mil gracias, Andrés; ojalá se pareciera, siquiera de forma ligerísima, a ese gran libro, del que, por cierto, todavía no he traído nada por aquí (así que no tardaré). Mil abrazos, Andrés :)))

    ResponderEliminar
  5. Anónimo12:43 p. m.

    Me acuerdo del poema y de su lectura, cómo pasan los años...me gusta, si. un beso. cuti

    ResponderEliminar
  6. Anónimo12:00 p. m.

    Y yo que no puedo sino pensar en la A6 llena de nieve y pringados atascados.... jajajajajaja.

    Mala que es una, si señor, es verdad, lo reconozco ;)

    ResponderEliminar