Un poema de Extraño abordaje
Muchacha:conoces ese aromaa día que se alarga enloquecidoretrasando la nochecalles que crecenindicio vehemente de un veranoque llegará con tus sandaliasy pies doradosy con él la terraza luminosadel marduna rizadala noche transparentesu levante cálido y levede música y azotea sorprendidade tanta luna donde aquel muchachodel pasado añomirará atónito tu cuerpotesoro ya perenne del verano.
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No sé, compa Enrique, si es la influencia de la ilustración, o la potencia de los versos, o los casi treinta que hacen ya, a estas horas, tan temprano -o una mezcla de las tres cosas-, pero me he puesto ya en modo "verano-on": mérito que te puedes apuntar...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y buena semana.
Gracias, compa Manuel y coñis coñis, 30 grados. Córdoba es mucha Córdoba. Aquí ha habido una noche infernal, con 24. En todo caso, ese modo verano-on, que también programo en mi persona, seguramente será efecto de la ilustración y el calor; los versos son viejos, muy viejos. Un abrazo fuerte, compa y buena semana también para ti :)
ResponderEliminarPues a mi me ha dado añoranza de veranos muy diferentes, será que los años del poema han pasado también por mi...un beso. Cuti
ResponderEliminarNb aqui noche también infernal
A mi me has entibiado un poco este gélido invierno argentino.
ResponderEliminarMuy a propósito la imagen..
Envidio sanamente esa facilidad para plasmar en unos versos todas las sensaciones mágicas que produce el estío. Sin ninguna duda, mi estación preferida ^^.
ResponderEliminarPrecioso poema que, como dice un Anónimo (Cuti) por ahí me ha dado porponerme nostálgico de veranos pasados. Muy adecuados tus versos.
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